SINOPSIS:
A ti, querido lector,
hasta ahora virtuoso,
dedicamos este libro
de relatos suntuoso.
Leerlos no da pereza,
ni son vanos ni tediosos,
ciento y un relatos son,
según la gula, sabrosos.
Pero ten cuidado, amigo,
que este rimador te advierte
que tratar con los pecados
a más de uno pervierte.
Ya que por azar te encuentras
inmerso en estos relatos,
si los lees con mesura
darás sentido a tus ratos.
Entonces habrás vencido
a la insaciable avaricia,
de la que siempre se ha dicho
que es de por sí vitalicia.
Y si te piden prestada
esta gran obra maestra,
no te traicione la furia
ni veas intención siniestra,
que el imprudente lector
que con argucia conspira
te puede hacer sucumbir
en las redes de la ira.
Cuida bien que tu pecado,
no sea la vil envidia,
la que al envidiado ensalza
y sólo a ti te fastidia.
A la soberbia idolatran
presunciones y arrogancias.
Lee con humildad el libro
y huye de vanas jactancias.
Y si al final de esta historia
eres carne de lujuria,
olvida vicios lascivos
al menos una centuria.
Anímate, buen lector,
y aprovecha la ocasión
que te brindo en estos versos
que me inspiró el corazón.
En ellos te doy consejos
para evitar los pecados
porque en cuestión de virtudes
ninguno vamos sobrados.
Mª Isabel Soriano Vidal
Coordinadora del concurso de relatos